
“Soy Mercurio Argiphontes.
No vengo a decirte lo que sabes.
Vengo a matar la mirada que nunca duerme,
la que te impide moverte, desear, soltar.
Llevo la cabeza de Argos como talismán:
porque sólo quien ha matado al vigilante
puede guiar el alma libre
hacia su próxima transmutación.”